Osteopatía para bebés y niños

El nacimiento es un acontecimiento especial para la familia. Sin embargo, no todo nacimiento transcurre tal como la madre y el mismo niño lo hubieran deseado. Algunas veces surgen complicaciones que afectan el feliz acontecimiento.

El osteópata evalúa en cada uno de sus tratamientos la cabeza del niño/bebé, debido a que la movilidad de los huesos del cráneo y la circulación de los líquidos muestran el estado de salud.

Dado que la cabeza está expuesta durante el embarazo, y especialmente durante el parto, a grandes fuerzas, se comprende fácilmente que en esos procesos existen riesgos para la movilidad de los huesos del cráneo. A través de maniobras no naturales que ejercen fuerte presión, por ejemplo fórceps, vacuum, entre otras, pueden comprimirse los huesos y con ello producirse eventualmente una disminución de la movilidad. Estos movimientos, si bien son micro-movimientos, pueden resultar decisivos para las condiciones de presión del cráneo y para el desarrollo sano del sistema nervioso y del niño en general.

Posibles dificultades del parto:

• Parto prematuro
• Interrupción del proceso – bebé queda atrapado en la pelvis materna
• Nacimiento con fórceps ó con vacuum
• Cesárea
• Parto múltiple
• Tamaño del bebé en relación a la pelvis de la madre

A partir de estas situaciones durante el parto, pueden detectarse en el recién nacido algunos síntomas que señalan posibles trastornos en el niño. Cabe indicar, sin embargo, que no todas las situaciones nombradas darán lugar, necesariamente, a un trastorno.

Posibles síntomas del recién nacido:

• Bebé llorón
• Bebé que vomita
• Forma llamativa de la cabeza (por ejemplo: asimétrica y despareja)
• Un ojo mas pequeño que el otro
• Una oreja mas despegada o mas baja que la otra
• Trastornos de la deglución o respiratorios
• Postura llamativa de la cabeza o el cuerpo

Muchos de los trastornos no serán visibles desde el comienzo, sino que pueden aparecer más tarde en el proceso del desarrollo físico, mental o emocional del niño.

También los niños en edad escolar y, por supuesto, los adultos, se podrán beneficiar con un tratamiento osteopático, aun cuando el trastorno originario, por ejemplo embarazo o nacimiento, haya sucedido muchos años antes.

De esta manera, la Osteopatía Fluido-Energética, con su manera suave de establecer un diagnóstico y un tratamiento, puede tratar también aquellos trastornos que son consecuencia de un embarazo o parto difícil, y así ayudar positivamente en el desarrollo del niño.

Los mecanismos de compensación que el cuerpo ha construido para equilibrar estos trastornos ya no serán necesarios, y el cuerpo tendrá nuevamente mayores posibilidades y energía para el despliegue y desarrollo de las fuerzas físicas, mentales, emocionales y espirituales.

El método de la Osteopatía puede ayudar tanto en la curación como en la prevención.

“Obtienes increíbles resultados cuando le permites al niño que desarrolle todo su potencial. En un tratamiento yo les permito que sean todo lo que pueden ser. Ellos son los que realizan la curación, yo sólo abro la puerta.”

— Dra. Viola Frymann D.O.